Los equipos electrónicos tienen una cobertura de todo riesgo con un deducible del 10% y un mínimo de U$S 20.
Por ejemplo, si tu laptop vale U$S 1.000 y sufrís un hurto, se descuenta U$S 100 de la reposición. En caso de que tenga una rotura y la reparación salga U$S 150, se descuenta U$S 20.
Para los artículos de deportes la cobertura es contra robo, incendio y responsabilidad civil, con un límite de U$S 5.000. Estos artículos no tienen deducible.